Conocido también como “Madonna di campagna” (Virgen del campo), se encuentra al norte del poblado cerca de la línea de ferrocarril Novara - Mortara. Según los estudiosos puede fecharse al último cuarto del siglo XI. Ya documentado una primera vez en 1077 y luego en 1181, el oratorio se presenta de aula única con ábside semicircular y con cobertura lignaria fueron muchas, a lo largo de los siglos, las intervenciones de restauración y la violaciones que sufrió el pequeño oratorio que, de todos modos, no comprometieron en modo irreparable su estructura originaria. La mampostería es constituida generalmente por ladrillos dispuestos en sentido horizontal ligados con mortero. La fachada odierna es un rehacimiento en estilo neoclásico de 1908 y luego fue modificada. El interior tiene preciosos frescos remontantes al siglo XV, que cubren completamente la zona absidal y la pared a la izquierda. De gran efecto es “la Pietà” (la Piedad) colocada en la parte central del ábside y atribuíble a los primeros años del siglo XV; coevos son los frescos representantes a una Virgen con Niño y a una pequeña Santa Elena. Remontante a 1481 y firmado por Tommaso Cagnola es el fresco representante a San Francisco, que presenta el oferente a la Virgen en trono con Niño y dos ángeles músicos; cabe notar la larga carta que presenta, en carácteres góticos, el cliente, el pintor y la fecha de ejecución. El fresco representante el milagro de San Eustaquio es reconocido por los expertos como obra de gran valor “histórico-religioso-estético” debido a la capacidad del autor de transformar la escena religiosa en escena caballeresca. También esa pintura se atribuye a Cagnola y su taller.