Ha sido la antigua iglesia parroquial hasta el siglo XVI cuando todavía el pueblo se extendía sobre la colina, ahora alrededor ha quedado el cementerio. De origen seguramente románico se presenta en la estructura original. La fachada es a dos aguas y en la arista derecha se encuentra el campanario. De nave única muy alargada, termina con un ábside semicircular. El interior es enriquecido por frescos de notable importancia histórica y artística remontantes al siglo XV. En la zona absidal es representado el Cristo Pantocrátor en almendra rodeado por los símbolos de los cuatro Evangelistas. Debajo de los Apóstoles, donde faltan dos figuras retiradas en 1975 debido a la apertura de dos ventanas originales de la estructura románica. Las pinturas más raras se encuentran en el parte inferior del ábside. Se trata de diez paneles separados uno del otro por un pequeño árbol y representan “el ciclo de los meses”. Los meses van de abril a enero y representan las actividades ligadas al mundo compesino. De notable elegancia es la figura del noble que caza con el halcón sobre su caballo.